Cercano a la ciudad Navarra de Estella-Lizarra, en una zona apartada entre las montañas de Yerri se levanta la grandiosa abadía Cisterciense de Santa María de Irantzu.
Fieles a su costumbre, los monjes cistercienses construyeron este impresionante monasterio en un valle cerrado, cerca de un río en el que el agua fluye generosamente y como horizonte el cielo que les permite estar cerca de Dios. Al observar en la lejanía el monasterio de Irantzu nos inunda una atmosfera de paz y serenidad que invita al reposo, a la reflexión y a la contemplación de toda la belleza que encierra esta magnífica construcción.
Fieles a su costumbre, los monjes cistercienses construyeron este impresionante monasterio en un valle cerrado, cerca de un río en el que el agua fluye generosamente y como horizonte el cielo que les permite estar cerca de Dios. Al observar en la lejanía el monasterio de Irantzu nos inunda una atmosfera de paz y serenidad que invita al reposo, a la reflexión y a la contemplación de toda la belleza que encierra esta magnífica construcción.
En este bucólico y solitario paisaje que forma el valle de Irantzu, a principios del siglo XI ya existía una iglesia bajo la advocación de San Adrián, perteneciente a una pequeña comunidad monástica benedictina. Un siglo después en el último cuarto del siglo XII, el obispo de Pamplona, Pedro de París, cede a su hermano Nicolás, perteneciente a la orden del Cister, estos terrenos para establecer aquí una comunidad de su orden. Comenzaron así las obras de construcción de este inmenso monasterio que creció al mismo ritmo que su patrimonio. Las obras no concluirían hasta entrado el siglo XIV, por lo que el estilo románico se solapa con el gótico, al igual que ocurre en otras construcciones de esta orden. La llegada de la peste negra, las guerras y la mala gestión de abades comendatarios hicieron que entrara en una oscura época de decadencia, aunque permaneció en uso hasta la desamortización de Mendizábal, siendo definitivamente exclaustrado en 1839. El abandono dio lugar a la ruina y su estado era penoso cuando en 1942 la institución Príncipe de Viana acometió su restauración o más bien deberíamos decir su reconstrucción.
En el monasterio de Santa María de Irantzu no veremos formas románicas puras, sino esa mezcla de un románico sobrio y tardío con un gótico incipiente, tan característico de la arquitectura cisterciense de los Siglos XII y XIII. En la actualidad el conjunto monástico se encuentra restaurado y en uso, conservándose como dependencias medievales más destacadas, la iglesia, el claustro, la sala capitular y la cocina todo ello sin olvidar otras necesarias para mantener en equilibrio la vida monacal, como eran la casa abacial, el refectorio y la cilla. La iglesia es una amplia construcción del siglo XII típica del estilo austero y sobrio del cister, articulada en tres naves cubiertas por una sencilla bóveda de crucería, que concluye en una cabecera tripartita. El claustro, de enormes dimensiones, es sin duda alguna la construcción más impactante de este monasterio. En las distintas formas de sus ventanales podemos ver la evolución que experimentó la arquitectura entre los siglos XII y XIV, que comienzan con sencillos arcos apuntados y culminan con bellas y complicadas tracerías góticas. Como es habitual en estas construcciones cistercienses delante del refectorio encontramos un hermoso templete gótico en cuyo interior, una fuente servía para el aseo de los monjes antes de la comida. A la sala capitular se accede a través de una portada típicamente románica y en su interior encontramos la habitual bóveda cuyos nervios confluyen en columnas con aspecto de palmeras. Muy interesante es también la monumental chimenea prismática que encontramos en su cocina.
Antes de marcharos no olvidéis observar la belleza de sus formas enmarcadas por las montañas desde la lejanía es una imagen que os aseguro tardaréis años en olvidar.
INFORMACIÓN DE UTILIDAD
En esta sección encontrarás datos y enlaces que te será de utilidad para preparar tu visita a esta joya del románico.
Horarios
Verano (de mayo a septiembre)
de 10 a 14 h y de 16 a 18 h.
Invierno (de octubre a abril)
de 10 a 14 h y de 16 a 20 h.
El precio de la visita es de 2.50 € libre y de 3.00 € guiada
Si necesitas más información puedes solicitarla en
Tfnos: 948 52 00 47 - 646 185 264
Email: monasteriodeiranzu@teatino.com
En tierras de Irantzu existe un importante abanico de actividades y visitas, puedes descargarte una guía muy útil en el siguiente enlace
También puedes visitar su web
Cómo llegar
El tiempo
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