Los Viajes de Bevi, la Bellota Viajera: Parque del Buen Retiro, Madrid

domingo, 10 de septiembre de 2017

Parque del Buen Retiro, Madrid

El Parque del retiro es una enorme extensión, nada menos que 118 hectáreas, que situado en pleno centro de Madrid, constituye el auténtico pulmón de la ciudad.
En él además de 15.000 árboles y bellos jardines, podremos encontrar un sinfín de monumentos, fuentes y esculturas que junto con sus numerosos y variados espectáculos culturales, nos harán pasar una preciosa tarde.

En su origen, en torno a 1630, este lugar estaba a las afueras de la villa de Madrid. Aunque no muy lejos del Real Alcázar, donde residía el Rey Felipe IV, era una zona boscosa y fresca por lo que resultaba una zona muy agradable, digna del descanso de todo un Rey. Fue por esta razón por la que el Conde-Duque de Olivares, regaló estos terrenos al Rey para establecer aquí su segunda residencia. Así con la reforma del Cuarto Real que había junto al Monasterio de los Jerónimos se inició la construcción del Palacio del Buen Retiro. A lo largo de la historia han sido numerosas las modificaciones que ha sufrido este parque, ya que cada Rey parecía querer dejar en él su impronta y si uno creaba un nuevo parterre, otro creaba una fábrica de porcelana y otro levantaba un observatorio astronómico.

No siempre pudimos los ciudadanos disfrutar de tan bello lugar, destinado al descanso de la corte y los reyes. Carlos III fue el primero en permitirlo, pero con una condición, había que ir perfectamente aseado y vestido para hacerlo y en aquellos entonces, no todos podían cumplirlo. No fue hasta 1868 cuando estos jardines pasan a ser propiedad municipal y entonces sí se abren las puertas para que todos pudieran disfrutarlos.

Numerosos son los puntos de interés que podemos encontrar en este parque, la puerta de España, el paseo de las Estatuas, la Rosaleda, los monumentos a Santiago Ramón y Cajal y a Benito Pérez Galdós, la casita del Pescador, la fuente de la Alcachofa y otros muchos bellos rincones donde disfrutar de un tranquilo paseo. De todos ellos haremos mención especial de la fuente del Ángel Caído, que esculpida en bronce por Ricardo Bellver, se levanta desde 1885 orgullosa de ser una de las pocas esculturas del mundo, sino la única, que representa al diablo en el momento de su caída. Otro de estos rincones es el Palacio de cristal, que fue levantado en 1887 con motivo de la Exposición de las Islas Filipinas, donde se dieron a conocer distintas flores de estas islas, y que demostraba que en España sabíamos construir invernaderos tan bellos como los ingleses. A los pies del palacio de cristal encontramos el estanque del retiro, donde terminaremos la tarde remando tranquilamente en una de las barquillas que podemos alquilar.