sábado, 24 de junio de 2017

Iglesia de Santa María, Viana (Navarra)


En plena calmodifican su carácter estilo y hasta su uso, la Iglesia de Santa María de Viana, no es le Mayor de Viana, se alza la soberbia figura gótica de la Iglesia de Santa María, uno de los mejores ejemplos de arquitectura gótica que se conserva en Navarra, que fue declarada Monumento Histórico Artístico en 1931.
Comenzó su construcción a mediados del siglo XIII, concluyéndose las obras a comienzos del siglo siguiente. Siempre he considerado a los edificios como organismos vivos, ya que al igual que estos nacen, crecen, una excepción, y sufre importantes reformas, modificaciones y añadidos durante los siglos posteriores a su “nacimiento”. Así en el siglo XVI se construyó la puerta sur y la torre, siendo en los dos siglos siguientes cuando la sacristía, la sala capitular y la estructura de su cabecera toman su forma definitiva. En el interior de este templo, apreciamos sus esplendidas formas góticas, sobrecogen sus enormes dimensiones, más acordes con las de una gran catedral, que las de una iglesia. Un placer es recorrer bajo unas magníficas bóvedas de sencilla crucería, sus tres naves a las que se abren sus hermosas capillas laterales, y donde podemos deleitarnos en la contemplación, de lo que me pareció uno de los elementos más hermosos de este templo, su triforio con sus arcos apuntados de preciosas tracerías góticas. 


En el exterior son más evidentes las transformaciones, que a lo largo de los siglos ha sufrido la primera construcción gótica del templo de Santa María de Viana. La principal y más monumental su portada meridional, uno de los mejores ejemplos de las fachadas del renacimiento español. Frente a ella, no es fácil distinguir si estamos dentro o fuera del templo, pues está construida a modo de retablo en piedra, en el que sus formas parecen adaptarse a la cabecera de una iglesia, en un muro curvo donde sus esculturas aparecen representando escenas de la vida de Jesús, la oración del huerto, la anunciación y el nacimiento de Cristo. 

En el suelo, a la sombra de esta fachada, se encuentra enterrado uno de los personajes más controvertidos de la historia de España, Cesar Borgia, hijo del Papa Alejandro VI, cardenal y capitán de los ejércitos de Navarra. Me dejó sorprendida encontrarme, que un personaje de este rango social descanse enterrado fuera del templo. Ya sabéis de mi curiosidad, así que preguntando pude averiguar que, tras más de 500 años de su muerte, aún sigue abierta la polémica de dónde deben descansar los restos de este personaje. En un primer momento, como correspondería a su estatus, fue inhumado en el presbiterio del templo, no se sabe la fecha concreta pero según cuenta una leyenda, fue en el siglo XVI cuando el obispo de Calahorra, mandó enterrar los huesos de Cesar Borgía en plena calle Mayor para que lo pisaran “ los buenos cristianos y las Bestias”, en venganza por la muerte de un familiar al que encarceló el Papa Borgía. En 1945 los restos fueron desenterrados y vueltos a enterrar donde descansan en la actualidad, aunque algunos son partidarios de buscarle un lugar más digno para su reposo. Sea como fuere Cesar Borgia tuvo que ser todo un personaje ya que ha trascendido como prototipo de individuo cruel y ambicioso, lleno de odio y rencor, que según cuentan inspiro a Maquiavelo para escribir su célebre obra “el príncipe”.



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Plaza de los Fueros, 1
31230 Viana (Navarra)
Tfno: 948 44 63 02
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